"LAS DERIVAS URBANAS DE LAS MEMORIAS."
                                                            Jairo Montoya Gomez
 

“Las memorias inscriben permanentemente huellas en los espacios urbanos de la ciudad, que evidencian en su materialidad - esa multiplicidad de ciudades invisibles o apenas ligeramente perceptibles que constituyen su trama y su conflictividad -.  Estas tramas se superponen y se cruzan generando el espacio grabado y constituyendo lugares que comienzan a hacer parte de un imaginario, hoy citadino más que colectivo.”

Las relaciones sociales del hombre son anteriores a la ciudad, precisamente ella surge de la necesidad de tener un espacio físico para su desarrollo,  un espacio diferenciable , nombrable y rememorable.
Con el paso del tiempo, nuevas relaciones se tejen en la ciudad y nuevas huellas van marcándose sobre las existentes , generando lugares físicos y  mentales.

Las huellas tienen la posibilidad de ser re - elaboradas y renombradas cada vez que  un nuevo rastro de la sociedad se inscribe en ellas. Además,   existen otras posibilidades : que se deterioren o se borren del registro individual o colectivo, o que interactúen  evidenciando un proceso de escritura coherente.

En la actualidad vivimos mas en una dinámica de lo simultáneo, que de lo progresivo , de modo que la inscripción de acontecimientos - memoria dentro de la ciudad, es múltiple y en muchos casos  la interacción con las marcas  preexistentes generan nuevos tipos de relaciones , a veces conflictivas, violentas o comunicativas, teniendo como referencia a  los espacios urbanos.

Entendiendo la ciudad como ese cumulo de palimpsestos, conglomerado de fragmentos, convivencia de diferentes realidades , donde todo es válido, es donde podremos descubrir todo el marcaje  memoristico y elaborado de los habitantes que vivencian el espacio.

“Se define la  huella como hecho físico evidenciador de memoria que por el hecho de ser inscrita, permite la repetición y la advocación, asegurando la conservación de un legado y la actualización de lo que así se conserva”.

En la situación contemporánea de ciudad, donde el cambio, la simultaneidad y la velocidad dominan todo movimiento urbano, es difícil controlar un proceso de actualización y conservación.
La multiplicidad de culturas que deambulan por todos los espacios urbanos, que se dejan horadar por ellos, imprimen significados sobre estos, yuxtaponiendose a   lo que existía anteriormente.
En este contexto , se reivindica la importancia de la imagen y el arte publico, entendido este ultimo como capaz de ser comunicativo y funcional de acuerdo a su entorno social.

Por factores como la velocidad, la crisis de los valores colectivos, la movilidad urbana, el ciudadano se ha convertido en urbanita , un ser individual , nómada y en cierta medida anónimo , pero que reclama la vivencia  y el disfrute de  su ciudad.
Esta es la posición que  asumimos para la lectura de estos acontecimientos.

Los cruces ,los flujos marcan la s huellas de reconocimiento , fijadas en caminos , recorridos y construyen las diversas  memorias urbanas.
Entre ellas:
? MEMORIA IMAGINARIA
? MEMORIA TACHADA
? MEMORIA DESCENTRADA
? MEMORIA ITINERANTE
? MEMORIA SIMULACRO.

Con este marco referencial de memorias y con la visión del urbanita , es entonces como nos aventuramos a comparar un mundo de ideas sobre “las derivas urbanas” y un mundo de experiencias “ acontecimiento / urbanita”.

La ciudad pretexto : Medellín , con siete casos ilustrativos de acontecimientos vividos y registrados de modo diferente como obras urbanas.

Hay una saturación de escrituras en la ciudad contemporánea que sin control se ofrecen a ese habitante  que transita y establece relaciones con sus lugares, genera sus propios imaginarios e historias y se identifica con determinadas huellas, inscritas por otros o por él mismo.  La memoria ha dejado de ser colectiva y se ha individualizado.

Empezando con la referencia a la MEMORIA IMAGINARIA, que nos ancla a imágenes y símbolos de reconocimiento individual , se ubican: el monumento recuerdo :PEDRO JUSTO BERRIO ,El monumento mítico de PEDRO NEL GOMEZ y el monumento adorno  LA GORDA DE BOTERO.

Pedro justo Berrío.
Da cuenta de un espacio fundacional y con dificultad trata de no ahogarse entre la multiplicidad de memorias que se han instaurado como capas en ese reducido espacio que conforma el parque que lleva su nombre, y que por suerte lo lleva, porque  si no, no lo sabríamos y sería de todos modos lo que hoy es, un fiscalizador y sobreviviente de la villa, que mira pasar inmóvil la civilización y el progreso  que se llevan por delante el recuerdo de las abuelas.

Mitologías de Pedro Nel Gómez.
Constituyen todo un imaginario legendario que hace parte de una idea de idiosincrasia que en su momento el maestro quiso resaltar.  Hoy están allí o podrían estar en cualquier parte.  Hoy la patetarro, la madremonte y las demás, son escenario para el rock, el cine y las drogas.  Se han convertido en escenario excéntrico, sin importar mucho su significado.  Se ha transformado totalmente el carácter del monumento, sin perder su condición de punto de referencia.
La gorda.
Por su escala y ubicación estratégica, se ha convertido en punto de referencia y encuentro.  Ha dado un nombre a esa esquina, generando un nuevo lugar para determinados grupos de la población.  Lo único que recuerda es el arte como arte.

Para la MEMORIA TACHADA, aquella que necesita eliminar toda marca de lo que antecede, reconocemos a la PLAZA DE CISNEROS como lugar de yuxtaposición de memorias. En la cual “La superposición, mas que hibridación de memorias que se da en el lugar, evidencia el paso de la villa a la ciudad y simultáneamente nostalgia (estación villa), imposición de poder (Alpujarra) y olvido (plaza de mercado y edificios Carre).”  La falta de relación la enfatiza la gran avenida que impide cualquier tipo de comunicación . El sector de cisneros se convierte en un síntoma del pasado que hoy muestra la condición fragmentada de la ciudad. El espacio de la plaza se halla actualmente sin referencia , solo le queda la memoria fotográfica que narra la historia pasada y los recuerdos en los habitantes que la vivenciaron.

Diferente es el caso de la MEMORIA DESCENTRADA,(memoria planificada) correspondiente a la estructuración, diseño  del  BARRIO LAURELES, donde cabia la premisa :La ciudad como obra de arte.
“En cierta medida la planeación del barrio , da cuenta de una nueva ciudad que funciona en torno a múltiples espacios de sociabilizacion y no en torno a una única plaza representativa. Además evidencia la condición moderna de la movilidad ,convirtiendo la avenida en elemento y soporte de arte urbano.”

Este tipo de planeación hace que el sector se convierta en lugar y soporte inclusive múltiples superposiciones y transformaciones de memorias sin perder su poética.

Para un ITINERARIO DE MEMORIAS , donde existe la circulación de las mismas,  el PARQUE DEL POBLADO, resulta ser un espacio de tales características. Ahora el carácter social , económico del sector. Se convierte , entonces en  espacio de circulación de memorias. Para el urbanita este ya no es un lugar conmemorativo fundacional, aunque una placa con inscripciones así lo indique.
El parque , existe en la memoria citadina con nuevas connotaciones,  y las marcas del pasado (iglesia, árbol y monumento )forman parte del juego de circulación de memorias que allí se da. El hecho de que el parque establezca relaciones entre múltiples temporalidades culturales no implica que se convierta en  un “no lugar” o que sea un espacio del anonimato.

Por ultimo , el caso del PUEBLITO PAISA, como  MEMORIA SIMULACRO (imitación), logra crear la Espectacularizacion de la memoria.
Simulacro de pueblito, que de paisa tiene la nostalgia.  Lugar en tanto que permite que el ciudadano se traslade a otro escenario y compre la cultura que siente perdida pero e cierta medida propia como sus raíces.
Se crea entonces un espectáculo cultural estático .
El lugar concebido,  evidencia otras dinámicas que la ciudad impone: el comercio , el turismo , la imagen. Un simulacro histórico es cruzado por la vivencia de las condiciones culturales y económicas.
 

Esta mirada  nemotecnica, nos permite aproximarnos a un punto de vista diferente. Entender y descubrir los imaginarios que tejen las diversas redes de relaciones entre los urbanitas y las obras de arte urbano en el espacio publico.
Nos abre las proyecciones a unas propuestas de arte urbano en la ciudad contemporánea , de interacción , donde este ( monumento , espacio publico, planeación urbana), esta llamado hoy  a convertirse en el creador de lugares. Motivación  que da cuenta de las actividades sociales, las comunicaciones, la interacción entre los habitantes , desde su condición individual o colectiva.

Una permanente construcción de memorias (acción perlaborativa) que atienda mas a la obra de arte urbano dentro del proyecto urbano como obra útil ( social , comunicativa y funcional) que como monumentalidad, rememoración o conmemoración.

El arte y el espacio urbano deben construir hoy más escenarios propicios para la pluralidad y para el cambio.  Espacios que permitan todo o nada, en donde  se pueda identificarse con el espacio pero cada también ,nos permita la elaboración sus imaginarios.
Que tengan cabida tanto  el recuerdo como el olvido, la permanencia como lo efímero y el encuentro tanto como el choque.

Tratar con nuevos tipos de intervención como : las instalaciones, land - art., urbanismo, arquitectura, escenarios y participación social. Donde se pueden registrar como marcas de la memorias las transformaciones  e interacciones de todos estos elementos.

Bien dice Ignasi de Sola Morales que las diferencias son precisamente lo que caracteriza hoy a la ciudad y es precisamente lo que la enriquece .

MARCELA MONTOYA.
SANDRA C. MESA G.